El mundo de los acuarios plantados puede resultar fascinante, aunque también complejo. Uno de los parámetros que más dudas genera entre los aficionados es el TDS (Total Dissolved Solids o Sólidos Disueltos Totales). En este artículo se explica qué es el TDS, por qué es relevante en un acuario plantado y cómo interpretarlo correctamente. Además, se muestra una forma avanzada de calcular el volumen neto del acuario utilizando la conductividad eléctrica del agua, lo que permite ajustar con mayor precisión la dosificación de fertilizantes, CO₂ y otros productos.
¿Qué es el TDS?
El TDS mide la cantidad total de sustancias disueltas en el agua, tanto orgánicas como inorgánicas. Esto incluye sales, minerales, nutrientes y otras partículas. Es importante destacar que el TDS no revela qué sustancias están presentes, sino su cantidad total.
¿Por qué es importante el TDS en un acuario plantado?
- Indicador de estabilidad: Un TDS constante suele reflejar una buena estabilidad en el ecosistema del acuario. Fluctuaciones importantes pueden ser señal de desequilibrios.
- Evita el estrés en peces y plantas: Un TDS elevado puede causar estrés osmótico, especialmente en especies sensibles.
- Permite hacer seguimiento de cambios: El TDS ayuda a detectar acumulaciones de desechos, exceso de fertilización o alteraciones tras cambios de agua.
Puntos clave sobre el TDS
- En acuarios de agua dulce, se recomienda mantener el TDS por debajo de 1500 ppm.
- La composición del TDS importa más que su valor total: Dos acuarios con el mismo TDS pueden tener composiciones muy distintas.
- Los cambios de agua periódicos ayudan a mantener el TDS bajo control.
- El TDS es una herramienta útil para detectar cambios relativos, pero no sustituye otros parámetros como pH, gH o NO₃⁻.
Cálculo avanzado del volumen neto del acuario usando la conductividad
El volumen real de agua de un acuario no equivale al volumen nominal. Elementos como sustrato, decoración, plantas, filtros y mangueras ocupan espacio o contienen agua adicional. Para estimar de forma más precisa el volumen neto, puede utilizarse la conductividad del agua antes y después del cambio, junto con la del agua nueva.
Fórmula utilizada:
Volumen total (L) = Volumen de cambio × (Conductividad actual – Conductividad del agua nueva) ÷ (Conductividad actual – Conductividad objetivo)
Parámetros necesarios:
- Conductividad actual del acuario (µS/cm)
- Conductividad del agua de reposición (µS/cm)
- Conductividad deseada tras el cambio (µS/cm)
- Volumen de agua a cambiar (litros)
Consideraciones importantes:
- El resultado incluye el agua presente en el filtro, mangueras y otros elementos del sistema de circulación, como sumps o UV.
- Esta fórmula permite estimar de forma precisa el volumen real total del sistema, ideal para dosificaciones exactas.
Consejos prácticos
- Utilizar un medidor de TDS o conductividad para realizar controles periódicos.
- Realizar cambios de agua regulares para evitar acumulaciones de sales y nutrientes.
- Ajustar la dosificación de productos en función del volumen real, no del volumen teórico del acuario.
- Tener en cuenta las necesidades específicas de peces y plantas en relación con el TDS y la dureza del agua.
En resumen
El TDS es un parámetro útil para el control del agua en acuarios plantados, aunque no debe analizarse de forma aislada. Comprender su comportamiento, junto con el cálculo del volumen real del acuario mediante la conductividad, permite mantener un entorno más saludable, estable y eficiente para las plantas y los habitantes acuáticos.